Hicimos un emocionante viaje en nuestra camper hacia un lugar lleno de encanto y tradición, La Guardia, en la provincia de Pontevedra. Con la ilusión de descubrir lo imprescindible que este hermoso pueblo gallego tenía para ofrecer, nos adentramos en sus calles empedradas y nos dejamos llevar por su atmósfera única.
El viaje en la camper fue una experiencia en sí misma, disfrutando de los paisajes costeros y las colinas verdes que caracterizan a esta región de Galicia. Al llegar a La Guardia, encontramos un lugar tranquilo para estacionar nuestra camper y comenzamos a explorar los tesoros que este rincón gallego tenía para ofrecer.
No pudimos hacer nuestro primer destino imprescindible, el Monte de Santa Trega, una colina sagrada que se alza sobre la ciudad y ofrece vistas panorámicas impresionantes, por motivo de que estaba cerrado el acceso, lo que no fue óbice para continuar con nuestro recorrido por La Guardia, explorando su casco antiguo. Nos enamoramos de sus calles estrechas y empedradas, con casas de piedra y balcones adornados con flores. Nos detuvimos en la Plaza del Reloj, donde disfrutamos de la animada vida local y nos dejamos tentar por los sabores auténticos de la gastronomía gallega en los restaurantes cercanos.
Además, no podíamos dejar de visitar el puerto pesquero de La Guardia, donde contemplamos las coloridas embarcaciones y el bullicio de los pescadores que regresaban con sus capturas del día. Nos deleitamos con platos de mariscos frescos en uno de los restaurantes junto al mar, saboreando la esencia del Atlántico en cada bocado.
También aprovechamos nuestra estancia para disfrutar de las hermosas playas de la zona. Nos dirigimos a la Playa de O Muíño, donde nos relajamos en la arena suave y nos bañamos en las aguas cristalinas del océano. Disfrutamos del sol y el sonido de las olas, dejando que la brisa marina nos envolviera.
Después de días llenos de exploración y momentos inolvidables, nos despedimos de La Guardia con un sentimiento de gratitud y enriquecimiento. Cada lugar imprescindible que visitamos nos permitió sumergirnos en la esencia de este hermoso pueblo gallego y conectar con su historia y tradiciones. Mientras nos alejábamos en nuestra camper, llevábamos con nosotros los recuerdos y la promesa de nuevas aventuras en lugares fascinantes. La Guardia siempre ocuparía un lugar especial en nuestros corazones.
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“Sé quién eres y di lo que sientes, porque a los que les molesta no importan, y a los que importan no les molesta.” |
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