sábado, 7 de noviembre de 2015

La Hermida, Cantabria, España

Nuestro emocionante viaje en camper nos llevó hasta la encantadora región de Cantabria, en España, donde encontramos un lugar verdaderamente imprescindible: La Hermida.

Al llegar a La Hermida, nos quedamos sorprendidos por la majestuosidad de sus paisajes montañosos. El valle estaba rodeado por imponentes montañas cubiertas de vegetación exuberante. Aparcamos nuestra camper en un área designada y nos dispusimos a explorar esta joya oculta.

Decidimos comenzar nuestra aventura con una visita al famoso balneario de La Hermida, conocido por sus aguas termales. Nos sumergimos en las cálidas y relajantes aguas, dejando que el estrés se desvaneciera y nos llenáramos de energía renovada. Fue una experiencia revitalizante y perfecta para empezar nuestro día.

Después de disfrutar del balneario, nos aventuramos a explorar el entorno natural de La Hermida. Realizamos una caminata por los senderos que serpentean a lo largo del río Deva, admirando las impresionantes vistas de los desfiladeros y las cascadas que salpicaban el paisaje. El aire fresco y puro nos llenaba los pulmones mientras nos adentrábamos en la naturaleza salvaje.

Decidimos hacer una parada en uno de los pueblos cercanos para probar la deliciosa gastronomía cántabra. Nos deleitamos con platos tradicionales como el cocido montañés, el lechazo asado y los quesos de la región. Cada bocado era una explosión de sabores auténticos que nos transportaba a la esencia de Cantabria.

Por la tarde, nos aventuramos a explorar las cuevas de La Hermida, famosas por sus impresionantes formaciones geológicas y sus pinturas rupestres. Descendimos por los estrechos pasadizos y nos maravillamos ante la belleza subterránea que se revelaba ante nosotros. Era como adentrarse en otro mundo lleno de misterio e historia.

Al finalizar nuestro día en La Hermida, nos sentamos junto al río Deva para contemplar el atardecer. El sol se sumergía lentamente en el horizonte, tiñendo el cielo de tonos cálidos y dorados. Nos sentimos agradecidos por haber tenido la oportunidad de descubrir este rincón imprescindible de Cantabria y de conectar con la naturaleza en su estado más puro.

Nos despedimos de La Hermida con el corazón lleno de recuerdos y la promesa de volver algún día. Nos subimos a nuestra camper, continuando nuestro viaje con la certeza de que habíamos vivido una experiencia inolvidable en uno de los lugares más imprescindibles de Cantabria.



A veces, las esperanzas son las alas que nos llevan a los cielos de lo imposible




En la oscuridad, encontramos la luz que nos guía hacia la libertad.


Me puedo resistir a todo, menos a la tentación.


En la danza de la vida, a menudo bailamos al ritmo de esperanzas ciegas, confiando en que el siguiente paso nos llevará a donde deseamos estar.



La vida sería trágica si no fuera divertida.



Detrás de cada sueño, se esconde la sombra de una esperanza, impulsándonos a avanzar sin ver completamente el destino


En este mundo de locos, la locura, es ser cuerdo.



Solía pensar que soy indeciso, pero ahora no estoy seguro.








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